SAUDADE

Escuché ayer una canción de Chico Buarque que jamás había oído en mi vida. Se llama pedazo de mi, esta en youtube y habla sobre la melancolía y la nostalgia.
Una vez leí un blog donde el autor se preguntaba cómo sería nombrar, o mejor dicho que palabra nombraba de manera correcta ese sentimiento que a veces tenemos., esa melancolía que llega de repente, pero que no es necesariamente del pasado, sino del futuro, aunque el futuro aún no llega. Una sensación así como cuando abres una carta leída mas de cien veces, un libro roto de la pasta, despegas un poster, caminas una calle y piensas en la historia que pudo escribirse. En lo maravilloso que hubiese sido aquel acontecimiento, el haber ido a ese concierto, el no haber ido a ese concierto, el haberte quedado, el haberte ido. El haber dejado atrás. Algo así como los finales opcionales en las películas. Como el “final alternativo” para tu propio largometraje. El pensar sobre qué pensar ahora si las cosas hubieran tomado otro rumbo. Eso al fin: la añoranza dulce y cruel de sentir que otro final pudo haberse escrito tras esa decisión. El deseo del futuro que no elegimos. El adiós que no dijimos. El adiós que sí dijimos. La quinta despedida sin éxito. La quinta despedida con éxito.
El saudade es esa emoción, ese pensamiento, esa melancolía o añoranza por lo que fue pero que no es ni será, o lo que es pero no fue nunca ni será, o por lo que será, pero que nunca fue ni es. Es un concepto cultural básico para los portugueses y brasileños, y según tengo entendido, de ahí también encuentra sentido mucha de la música que se hace en esos lugares…
Un desconocido me ha explicado esta breve definición, rara, pero me parece entendible, al menos lo mas entendible a lo que a veces también sentimos… o díganme si eso no lo han sentido al menos una jodida vez en su vida!!!
En fin, me pareció curiosa porque creo, que aunque empecé este blog como una especie de remedio casero, auto medicado para marina y para mi, desde hace algunos días tenia un desgano en escribir. No sabia exactamente porque. Pero sentía desgano y eso, que ahora sé, es lo mas parecido a un “saudade” (no sé si saudade se escriba con artículos, si alguien sabe me corrige jiji). En fin….
Esos días en que uno amanece malhumorado y sin ganas. Algo así como la balada del mal genio de benedettii, o instantes del maestro. Por cierto, eso también me ha puesto triste. A veces pienso que soy tan patética y que lloro por todo. Bueno, no todo, si un marciano llegara con una espada láser y un supositorio marca acme y se lo metiera a Ulises ruin o a jelipe calderón pos otra cosa sería no?....
Pero volviendo a este post emo. Pues sí, ya les decía que aquello era un coctel de causas. Aunque creo que ahora no está de más regresar a Benedetti, después de todo ese hombre me ha acompañado la mitad de mi vida con sus versos.
Debo confesar que no pude evitar sacar una lagrimita de Remi cuando a mi hermana le llego un jodido mensaje a su celular ( ah porque yo no tengo cela hora) donde UNONOTICIAS (no se que madres sea eso) le notificada que el maestro había muerto. Sentí como una presión en el pecho, algo así como si mi gorda y desproporcionada maestra de mecanografía de la secundaria se me cayera encima con toda su pestilencia a cigarro y esos horrorosos lentes de botella. En realidad me sentí algo tonta después, ja, pero vamos, el pretexto fue Benedetti, la cosa es que creo que de repente se me vinieron todos los recuerdos que ese hombre trajo a mi vida. Es como si Benedetti hubiera encontrado la manera de leer cada emoción de mis 20 años. Algo así como el soundtrack de una película, algo así siento que fueron algunos poemas de él en muchos pasajes de mi vida.
Tanto así, que alguna vez pensé que ese famoso poema de “Te quiero” que nacha Guevara canta en sus recitales, por fin tenia dueño, cuando conocí al innombrable. (jajaja, asi le pusimos la wera y yo). Sí, o cuando hace tres años, Vamos juntos era cantado en coro por los compañeros. O No te salves. No me salvo todos los días, aun en los peores, porque me acuerdo de Benedetti, y de Pedro y el capitán. Acordarme de viceversa, de rostro de vos… y de “compañera, usted sabe que puede contar conmigo”… uff, acordarme de cuando nos leíamos tanas fragmentos y pensábamos que nos habíamos encontrado al fin. Uff, y bueno, acordarme de Mario Benedetti y de todo todo lo que pasé junto a sus poemas, de las cosas hermosas que viví al lado de quien compartió conmigo el placer de leerlo, cuando pensábamos que el amor era eso que sentíamos. De las cosas feas, dolorososas, etcétera. En fin, cómo no ha dolerme un poco la muerte de Mario B., si un poco de mi historial amoroso también se va con él. Y esta vez es una quinta despedida con éxito.
SAUDADE.

PD. Dejo una canción, no es la de chico buarque, porque mi post ya es lo suficientemente emo ja. Mejor una de gotan project.